Pero los espejos también podían ser aterradores debido a su poder para captar imágenes. la gente temía que el alma se perdiese en su interior y ya nunca saliera. Por lo tanto, algunos pueblos pensaban que tapar los espejos en una casa donde acababa de morir alguien era una forma de evitar que el fantasma del difunto se llevase el alma de los vivos.
Según James Franzer, en La rama dorada, el miedo a que los espejos atrapasen el alma estaba muy extendido "tanto en la antigua India como en la antigua Grecia, la gente tenía por norma no mirar su reflejo en el agua, y ... sin un hombre soñaba que se veía reflejado de esta manera, los griegos lo interpretaban como presagio de muerte. Temían que los espíritus del agua se llevasen el reflejo de la persona o el alma a las profundidades, condenándolo a morir sin alma".
Creencias semejantes explican por qué los enfermos debían evitar contemplarse en el espejo, pues su alma estaba precariamente sujeta y corría el riesgo de perderse dentro de él. Las almas infantiles estaban especialmente expuestas al peligro, por lo que el folclore advertía a los adultos que mantuviesen a los niños de un año o menos alejados de los espejos.
Puesto que los espejos eran tan poderosos que podían capturar almas, en numerosas culturas se creía que romperlos traía mala suerte. En China, por ejemplo, se presagiaba que el propietario del espejo perdería a su mejor amigo. Los romanos pensaban que acarreaba siete años de mala suerte, ya que consideraban que la salud de una persona evolucionaba en ciclos de esta duración.
Yo que sentí el horror de los espejos
no sólo ante el cristal impenetrable
donde acaba y empieza, inhabitable,
un imposible espacio de reflejos
.
sino ante el agua especular que imita
el otro azul en su profundo cielo
que a veces raya el ilusorio vuelo
del ave inversa o que un temblor agita
.
Y ante la superficie silenciosa
del ébano sutil cuya tersura
repite como un sueño la blancura
de un vago mármol o una vaga rosa,
.
Hoy, al cabo de tantos y perplejos
años de errar bajo la varia luna,
me pregunto qué azar de la fortuna
hizo que yo temiera los espejos.
.
Espejos de metal, enmascarado
espejo de caoba que en la bruma
de su rojo crepúsculo disfuma
ese rostro que mira y es mirado,
.
Infinitos los veo, elementales
ejecutores de un antiguo pacto,
multiplicar el mundo como el acto
generativo, insomnes y fatales.
.
Prolonga este vano mundo incierto
en su vertiginosa telaraña;
a veces en la tarde los empaña
el Hálito de un hombre que no ha muerto.
.
Nos acecha el cristal. Si entre las cuatro
paredes de la alcoba hay un espejo,
ya no estoy solo. Hay otro. Hay el reflejo
que arma en el alba un sigiloso teatro.
.
Todo acontece y nada se recuerda
en esos gabinetes cristalinos
donde, como fantásticos rabinos,
leemos los libros de derecha a izquierda.
.
Claudio, rey de una tarde, rey soñado,
no sintió que era un sueño hasta aquel día
en que un actor mimó su felonía
con arte silencioso, en un tablado.
.
Que haya sueños es raro, que haya espejos,
que el usual y gastado repertorio
de cada día incluya el ilusorio
orbe profundo que urden los reflejos.
.
Dios (he dado en pensar) pone un empeño
en toda esa inasible arquitectura
que edifica la luz con la tersura
del cristal y la sombra con el sueño.
.
Dios ha creado las noches que se arman
de sueños y las formas del espejo
para que el hombre sienta que es reflejo
y vanidad. Por eso no alarman.
Historia de los espejos, Mark Pendergrast, Ediciones B, Méjico, 2003. Pág 41-44
Para mí, pocas cosas hay más aterradoras que un espejo en la oscuridad de la noche.
ResponderEliminarSiempre que he dormido frente a un espejo, he pasado parte de la noche viendo cosas que no estaban ahí. O al menos, a este lado del espejo.
¿Habrán atrapado mi alma?
Ummm, sabes que mi alma versaillesca hace que los espejos me fascinen y lejos de sentir terror, sufro de una atracción enfermiza hacia ellos.
ResponderEliminarAunque puedo contarte una anécdota de cómo un día estuve a punto de ver reflejada un alma. Estaba arreglándome en el vestidor cuando me pareció escuchar un ruido extraño. Giré la mirada y no había nada al final del pasillo. De pronto Bruma se quedó inmovil, con las orejas levantadas: ella también escuchaba algo. Y de refilón, al fondo del corredor, en el espejo de la entrada, pude ver la figura de alguien que entraba hacia la casa. Salí tras ella, revisé cada habitación. No había nadie, ni nada. Al menos, a este lado del espejo.
waooooo,he estado leyendo estas historias de los espejos y me he quedado sorprendida pues hace dos noches tuve un sueno, donde alguien me atacaba,era un hombre desconocido y al despertar vi frente a mi mi espejo todo rojo color sangre,,por unos segundos y una bruma a su alrededor,estoy pensando que algo raro esta pasando,pues fue traido de otra casa ,que susto,
ResponderEliminarhola solo quiero a ser una simple consulta ,ya mirado varios foros aun no encuentro una respuesta a mi situación ,desde muy niña sufrido cosas muy extrañas que me siguen sucediendo no puedo comprender .solo cuando tuve mi primer susto a un espejo era cuando tenia tan solo seis ,años frente al reflejo de el tele a pagado me congele solo para observar algo que no creía que podía estar viendo algo que aun sigo recordando ,aparte de los sucesos de un animal que nos acechaba ami y mi madre y hermana a la solución de esto con currimos a una iglesia .para sacar todo esto acontar de nuestras cosas ellos se burlaron y se enfadaron ,prometimos que no abriolamos mas de este tema ya que no saca del sistema social,el oír,el ver ese pero negro que solo nos traía malas noticias de muerte o que cada años corría al rededor de la casa de mi madre queriendo entrar y atemorizarnos y en nuestros sueños ,que me pasa porque me pasa esto ami tengo miedo de dejar la tele apagada duermo con la tele prendida, doy vuelta los espejo o cual quier cosa que a ga algun tipo de reflejo necesito ayuda quiero saber por que esto ami cual es mi situación y encontrar una solocion,sobre mis sueños y sucesos.gracias
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